Los Oni espaciales de Urusei Yatsura

Urusei Yatsura

Mi primer contacto con el anime fue gracias a la 2 y a TV3. La mayoría de series que he visto han sido en la televisión autonómica y en catalán. Por esa manía/tradición que tienen en España, yo empecé a ver en el instituto diría que fue, “Lamu”. Tardé bastante en saber que el nombre original de la serie era Urusei Yatsura.

Basada en el manga de Takahashi Rumiko, cuenta la historia de una alienígena llamada Lamu (o Lum) que llega a la tierra para poner a prueba a la humanidad y acaba prendada del que menos podría esperarse uno. Más de uno debió pensar que si una invasión extraterrestre era con chicas tan guapas no les importaría.

Sin embargo, por encima de esa cara bonita hay un par de cuernos. ¿No os recuerda, además, esa indumentaria con estampado de tigre a cierta criatura de la mitología japonesa? ¿Es posible que los venidos del espacio exterior no sean hombrecillos verdes sino… un grupo de oni?

Título original       Urusei Yatsura (うる星やつら)
Título en español      Lamu
Autor    Takahashi Rumiko
Revista   Shōnen Sunday
Estudio de animación    Pierrot, Studio DEEN
Año     Manga: 1978-1987    Anime: 1981-1986
Editorial japonesa   Shōgakukan
Editorial española   Glénat

Si no habéis visto la serie os planteareis qué tiene que ver una extraterrestre con la mitología japonesa. Resulta que esta raza de invasores son nada más ni nada menos que oni.

Lum_and_Family

Los oni son unos de los personajes más reconocibles del imaginario japonés. Se traduce tanto como «demonio» como «ogro». Su aspecto me recuerda al del ogro de nuestros cuentos de fantasía. Su piel puede ser de diferentes colores según su personalidad: roja si es avaro, azul para los iracundos, negra si es tonto; también los hay amarillos. De aspecto generalmente antropomórfico, acostumbran a tener cuernos en la cabeza, y uno o más de dos ojos. Suelen ir vestidos con pieles de tigre y armados con garrotes de hierro. Son conocidos por comer humanos e incluso torturarlos. El color rojizo de piel, su carácter generalmente maligno (aunque no siempre) y el papel de guardianes del infierno que les atribuye el budismo; les otorga características para ser percibidos también como demonios.

Volvamos a la serie. Lamu y los suyos representarían una versión humanizada de oni. Conservan algunos de sus rasgos distintivos: la presencia de cuernos en su cabeza o las ropas con estampados de tigre a imitación de las pieles prehistóricas de los oni. Por otro lado el que dispongan de tecnología puntera recuerda al espectador que vienen de otro planeta y los aleja del mito.

77c40cf07681db81c4e98f585c0640ec1453152235_fullEn la serie, estos visitantes tienen ciertas habilidades solo que no todos las mismas. Lamu es capaz de volar y soltar grandes descargas eléctricas. El poder los oni era tal que muchos les atribuían la capacidad de controlar el viento y los rayos, un posible origen de los poderes de la chica. Para ello, sus cuernos juegan un papel crucial ya que son el origen de su poder. En el caso de Ten, el primo pequeño de Lamu, también puede volar como ella pero además, en vez de electricidad, escupe fuego a pesar de que no se le dé aún muy bien. Ran, la ex-amiga de Lamu, roba la juventud de aquellos a los que besa en los labios. Rei, el guaperas glotón, cambia de forma pero solo a la de un monstruo con rasgos de tigre. Oyuki, otra amiga de Lamu, domina el hielo y la nieve. Habría que hacer un inciso en cuanto al «control»: ninguno de estos personajes es capaz de tener su poder siempre bajo control, las emociones extremas o su enfado puede desencadenar un desastre.

Mención aparte merece Benten, la amiga motorista y amante de la destrucción de Lamu. Ella forma parte de los Fukijin (Dioses de la fortuna), una raza que compite con los Oni. Esta competición se libra en el Setsubun. Se trata de una festividad celebrada en febrero en la que se da la bienvenida a la primavera. Se suele celebrar un ritual para echar la maldad y alejar a los demonios. Lanzando habas al exterior de la casa se grita: «oni wa soto, fuku wa uchi!» o en cristiano «¡Fuera los onis, adentro la suerte!» ¿Puede existir mejor fecha para que Benten (del bando de la suerte) y Lamu (como oni) monten batallas campales?

La contraposición a los oni y un elemento recurrente en los cuentos de yokai es la sacerdotisa, papel que ejerce en la serie, Sakura. Su riguroso entrenamiento le permite controlar demonios, espíritus y realizar exorcismos. De tratarse de un relato clásico, Sakura acabaría expulsando o derrotando a Lamu y los suyos. Pero esto es un shojo con tintes de comedia, y los invasores tampoco son tan malos.

A lo largo de la serie aparecen otros personajes propios de la mitología como Kitsune, un pequeño zorrito que como tal cambia de forma (aunque no muy bien) y está enamorado de Shinobu; Kurama, una princesa alienígena que representa a los Karasutengu (tengu con forma de cuervo) y que le tiene mucha manía a los oni; o el Kotatsu-Neko, la mascota de la serie que se dedica a aparecer de fondo en algunas de las escenas. El pobre representa el espíritu de un gato que murió ahogado y «en teoría» es un ente vengativo aunque no acostumbra a dar problemas.

Oni

Una cuestión que me llama la atención y me resulta interesante es la siguiente: ¿por qué para representar a algo tan ajeno como una criatura que viene de otro planeta, la autora elige una criatura propia de su mitología? ¿Eso no provocaría el efecto contrario al verse como algo propio?

Si nos basamos especialmente en Lamu, a pesar de su aspecto de humana y si se obvian sus poderes, presenta ciertos rasgos que chocarían mucho a la sociedad de la época en la que se estrenó. La indumentaria de la chica es muy sexy: viste un bikini y botas altas. Y va así vestida (o poco vestida) casi toda la serie. Aunque el estampado recuerde a las ropas de los oni, el tipo de ropa no.

Es muy propensa a expresar sus sentimientos, sin filtros, sin indirectas: ¿hay algo más antijaponés y ajeno a ellos que eso? Se trata de una sociedad que prioriza la armonía, el no crear conflictos y el ser políticamente correctos. No son muy fans de ser sinceros con lo que sienten y menos aún expresarlo. Este afán por mantener la compostura a costa de sus verdaderos sentimientos o pensamientos se denomina tatemaey por el contrario el ser sincera como Lamu e ir de frente, sería el honne, lo que realmente siente o piensa.

Esperamos que con estas pequeñas reflexiones hayáis aprendido algo más sobre los oni, el tipo de personaje que aparece en la serie y sobre todo que os animéis a revisionarla. Series como esta nunca pasan de moda.

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